El sistema SSR es una tecnología runflat desarrollada por Continental especialmente para neumáticos de sección baja, que aún son compatibles con todas las llantas estándar. El principio SSR se basa en una pared lateral reforzada autoportante. En caso de pinchazo, esto evita que el flanco quede aplastado entre el neumático y la carretera, y que este se salga del rin, lo que hace que el neumático de refacción quede obsoleta. No tener que llevar una llanta de repuesto significa una reducción de peso, lo que mejora la eficiencia del combustible. También suma hasta 80 litros de espacio libre en el maletero. Se recomienda encarecidamente el montaje en cuatro posiciones, si aún no es obligatorio por ley y no se permite la reparación de los neumáticos.